25.10.07

El día que Elektra fue Muñe


Anoche llegué a casa a la hora de la cena, y me llamó la atención que Elektra no se tiró de cabeza contra la puerta a recibirme, solamente apareció Frida a saludarme con sus patitas en mi zapatilla, una especie de emotivo saludo que hace desde que era chiquita. Pensé que en cualquier momento bajaría descolgándose del techo como un moño araña, pero las horas iban pasando y la inadaptada no aparecía, era evidente que se había ido de gira. Fridiquis andaba media perdida y maullaba con voz penosa en el patio, supongo que la extrañaba o se asomaba a gritar: "Elektra, así estamos bien, no vuelvas". Me dio la impresión de que estaba triste. Miramos un rato de tele tiradas en el sillón.


Las horas pasaban y ni novedades de la gatita, para colmo había viento y cada ruido era una esperanza de que apareciera, pero nada. Subimos al cuarto a dormir. Me desperté varias veces a lo largo de la noche y me asomé a mirar los techos, dormí inquieta pensando en el paradero y la salud de la intrépida cuadrúpeda. A las 7 a.m no pude dormir más, tuve que poner radio a.m y volví a palmar hasta la hora de levantarse. A las 9 en punto estaba en la puerta de la veterinaria para preguntar si alguien había pasado para avisar. Y efectivamente, una señora de pelo corto había encontrado una "siamesa" con collar. Desesperada pregunté el contacto y no había dejado ni dirección ni teléfono, no había querido. Tenía que venirme para la oficina, pero no estaba tranquila, el jefe hoy no estaba así que fui a preparar carteles para pasar por debajo de todas las puertas de la cuadra. Me derretí bajo el sol, caminé varias cuadras para conseguir fotocopias y transpiré de los nervios. Empecé a dar la vuelta manzana y cuando llegué a la tercera cuarta parte del empapelamiento apareció corriendo una mujer de pelo colorado corto con cartel en mano al grito de: ¡ACÁ, ACÁ, ACÁ! Ella tenía a Elektra, me dijo que se cayó en el patio, que tiene seis gatos, que están ofendidísimos desde que llegó ayer a la tarde, que les hace frente, que los rajó de la cama, que se adueñó de la casa de la señora, que se la pensaba quedar si nadie la reclamaba y que es una dulzura maulladura y ronroneadora. Cuando abrió la puerta se tiró de cabeza a ver quién venía, es increíble lo rápido que se amotina en cada propiedad. ¿Cuántas casas habrá tenido ya ? La señora quiso mostrarme a su sexteto felino pero estaban escondidos y de mal humor, solamente vi a dos, que eran enormísimos, uno naranja llamado Federico y otro marrón rayado, los dos con una carita de orto mortal. Me dijo que le puso "Muñe", por muñeca, ay por dios, que mal gusto.

La agarré y la llevé para casa, quedé en llevarle un presente de agradecimiento por devolverla, me dijo gracias 5 veces, estaba más contenta que yo la mujer, la nena volvía a su hogar.
Elektra fruncí los cantos, preparate porque se viene la castración...


( necesito que te quedes así de quieta... )

5 comentarios:

p dijo...

las mascotas son fiel reflejo de sus dueños... cofcof..

porlosporos dijo...

jajajaajajajajaaa
que capa!!!

que buena vida tienen estos bichos!

ya conociste una vecina!!!! jajajaaj que buena onda

Vicky dijo...

dios mio que gata quilombera!!!! castrala ahora, sino vas a hacerte malasangre (?) todos los días

Mirandita dijo...

me parece que luego del escape de la felina, a la vecina, le vas a poder llevar un gatito bebé como presente de agradecimiento!!!

apurate para castrarla antes de que tengamos que acunar gatitos, por favor...

Guerrillero Culinario dijo...

Cuando era chico tuve un gato al que le puse Rocky (porque era chico y no tenía buen gusto para los nombres), vivió como 13 años, en el medio tuve otro que le decíamos "Negro" pero un día se tomó el buque y no apareció más. También tuve por 4 horas una de esas negro con puntitas anaranjadas que no llegó ni a tener nombre porque se fué. Después que se murió Rocky no tuve gatos hasta que un día encontré una caja con 2 gatitos recién nacidos en la puerta de mi casa, los intenté salvar pero se murieron.
Al cabo de unos años a mi vieja le regalaron una gatita que le puso Luli (por el nombre de mi hermana Luciana y el mio Lionel), después empezó a darle de comer a gatos que andaban por la calle y en eso llegó una parecida a Elektra porque ya era grande y se adueño de la casa, a esa le dice "La Negri", también apareció otro a comer en la puerta de la casa de ella que terminó llamándose Grilli (porque hace ruido con el cascabel que le pusieron); este gato es más malo que la peste, cada vez que pasa otro gato (del que ahora voy a contar de donde salió) lo casca mal y lo caga a palos. Otro gato que se llama Marcos lo encontramos en Pilar, desnutrido y hecho mierda, ahora andará en los 7 kilos, es una bestia y es el gato MAS Cariñoso que conozco, hasta parece pajero el gato. Por último en la casa de mi tío apareció un siames todo clarito, no es siames pero tampoco es vereda/cordón. A este le puso RUSO (porque tiene los ojos claros como los tenía mi viejo). Así que ahora tiene una gata que le regalaron, una que se apropicuó de la casa, uno que vino de pilar y es un pajero, uno que vino de Pacheco y se la da de lindo y el de la puerta que no lo dejan entrar porque lo casca a Marcos.