16.5.08

Videillos del Norte

En un esfuerzo de producción hice dos videitos del norte, de las vacaciones.

Para verlos pasen por http://www.youtube.com/pituten

13.5.08

Cómo hacer mierda una maravillosa canción

Antes:
http://www.youtube.com/watch?v=NYDNuYU8p44


Después:
http://www.youtube.com/watch?v=RW2vOV_5Pj4



Encima la usan como primer corte, estos ladris sí que no tienen vergüenza.




Pit
(indignadísima)

8.5.08

Sobre perros calientes

Hay personas como yo que nunca se comerían un pancho en un puesto clandestino, y mucho menos una salchicha salida de una panchera natalia natalia de los puestos del subte. Para comer lo mejor es algo (rata, perro, gato, carne rancia) bien asado, lo más cocido (muerto) posible ya que los controles de bromatología nunca los vemos, existirán? ¿Cada cuánto cambiarán el agua? Los panchos caseros no tienen ese barandazo.

El otro día volvía en el subte, y como otras veces, ví a una mujer almorzandose un pancho a las cinco y media de la tarde, eso en realidad no es lo raro, a veces almuerzo a las seis o siete de la tarde y está buenísimo, la comida tiene hasta más sabor después de tantas horas con el estómago aireado. Ella sentada, yo parada la miraba con carpusa, y hasta podía sentir mi nariz impregnarse de ese olor a caldo grasoso que tienen estos perros calientes. Chorreaba ketchup y mayonesa y lo iba saboreando, casi al punto de que se enfriaba. Creo que un pancho se come caliente y con un toque de mostaza para disimular el gusto vomitivo de la salchicha.

Más allá del tema digestivo y subjetivo del gusto o no por este menú lo pienso por el lado de clavarse una salchicha en un espacio público, en un vagón en hora pico, comerla de frente, de costado, morder mucho, fuerte, suave, masticar rapido, lento, chorrearse la comisura de los labios ante la vista de todos. Comerse ese signo fálico así tan relajadamente, como con los helados en cucurucho.
Una persona tímida como yo no haría eso. Admiro profundamente a quienes lo hacen despreocupadamente como si se estuvieran fumando un pucho en público. Y cada vez que veo un comedor serial de panchos lo miro con detenimiento a ver cuando será el día que me anime.